Sensores de parking
Instalación de sensores de parking
Los sensores de aparcamiento son dispositivos que te ayudan a la hora de estacionar el vehículo. Estos sensores se instalan en los parachoques delanteros y/o traseros para avisar de los obstáculos que puedan existir en los ángulos muertos de visión y de la distancia disponible de maniobra.
Los sensores de parking se activan cuando ponemos la marcha atrás del vehículo de manera que si detectan algún obstáculo a una distancia inferior de dos metros, emitirán señales acústicas incrementándose a medida que nos acercamos al objeto para poder evitar un golpe.
Tipos de Sensores de parking:
– Los sensores de ultrasonidos: Van incorporados en los paragolpes. Son cilindros del tamaño de una moneda de un euro. Normalmente son cuatro y funcionan emitiendo ondas de ultrasonidos que rebotan en los obstáculos.
– Los sensores de detección electromagnética: Colocados en los paragolpes. Consisten en una tira metálica adherida al interior de este. Su funcionamiento se basa en la detección de alteraciones del campo electromagnético producida por objetos sólidos. Su detección es continua, cubriendo toda la parte trasera del vehículo. Tienen la ventaja de que son más resistentes ante un posible golpe.